Sin casi darte cuenta ya estamos en septiembre y quizás tienes la sensación de que necesitarías unos días más de vacaciones para descansar del período estival.
Más, si cabe, en este verano post covid, en el que todos nos hemos tomado las vacaciones como un punto de inflexión.
¿A alguien más le pasa? Según un estudio publicado por The American Psychological Association, el 38% de los estadounidenses asegura que su nivel de estrés aumenta durante las vacaciones.
Nos pasamos el año tratando de sortear entregas y cumplir deadlines imposibles. Al llegar las vacaciones, en algunas ocasiones mantenemos algunas de esas rutinas y las replicamos en actividades que, a priori, deberían servir para relajarnos.
¿El resultado? Algunos empleados y empleadas vuelven de vacaciones no completamente descansados. No hace falta ser muy espavilado para darse cuenta de las consecuencias de tener a un equipo de trabajo con un bajo nivel de bienestar no óptimo al reiniciar el trabajo.
¿Cómo ayudar a tu equipo en la vuelta al trabajo?
El descanso importa -y mucho- para la productividad de tu empresa. Conseguir que tus empleados y empleadas lleguen a septiembre realmente descansados puede ser crucial para conseguir tus objetivos. ¿Cómo conseguirlo?
1. Sé más flexible con el homeoffice
Según un informe publicado por West Monroe, al 33% de los/as trabajadores/as le gustaría disponer de más flexibilidad durante su vuelta al trabajo. Si en tu empresa hay una política de teletrabajo rígida, puedes plantearte una revisión durante las primeras semanas de septiembre.
2. Organiza actividades de equipo
Septiembre es un gran mes para organizar jornadas de teambuilding y eventos especiales. A todos nos emociona empezar nuevos proyectos. El inicio del nuevo curso puede ser un buen momento para canalizar toda esa energía positiva y transformarla en implicación con la compañía.
3. Haz partícipe a tu equipo de los objetivos anuales
El último cuatrimestre pasa volando. Es necesario mantener el foco en todo momento y alinear al equipo para conseguir el tan ansiado “budget”. Es clave involucrar al equipo desde la misma vuelta de vacaciones para conseguir su máxima implicación.
Las decisiones que se toman desde abajo tienen un mayor calado que las decisiones más jerárquicas. Tendemos a asumir como algo más estimulante y a tener un mayor compromiso con aquellas acciones en las que hemos participado activamente. Involúcrales en la medida de lo posible en la estrategia, que se la hagan suya.
4. Fomenta la conciliación
Septiembre es un mes muy especial, especialmente para tod@s aquell@s que tienen hij@s. La vuelta al cole no siempre coincide con la vuelta a la oficina y, durante algunas semanas, las familias hacen auténticos malabares para llegar a todo y no dejarse nada. Durante estos primeros días, es aconsejable que las empresas tengan una concepción más flexible de los horarios de trabajo.
5. Transmite confianza
El miedo nunca es un buen motor. Si pretendes que tu equipo se implique profesional y emocionalmente con tu proyecto, no puedes convertirte en un dictador. Necesitas generar un ambiente de confianza y bienestar en la oficina. Esto pasa por adelantarte a las necesidades de tu equipo, facilitar la comunicación y tener una capacidad de escucha importante. Saber qué están necesitando, empatizar con sus situaciones te permitirá ganarte su confianza. Y las personas nos esforzamos más por aquellos en los que confiamos.